lunes, 21 de octubre de 2019

Cumpleaños

Hay veces que apagar una luz
es guardar un secreto.

Tu edad todavía sigue siendo hierba verde,
los años son un traje con cicatrices,
con bolsillos dónde
se guarda lo que duele.

Hay veces que amanece y la vida es
encontrar un tesoro.

Hoy es uno de esos días...
para cruzar los puentes,
para apagar el pasado
y seguir construyendo orillas.

Hay veces que cierras los ojos
para poder ver el futuro.
Hoy es uno de esos días...
para poder cumplir años.















miércoles, 9 de octubre de 2019

Apagaste la luz.


Fuiste apagando luces, una a una,
como quién deshoja una margarita
esperando que el amor estuviera guardado
en el último pétalo.
La oscuridad siempre te ha quitado
las ganas de vivir y no has pensado
que alguien va a llorar por ti,
que alguien busca tu nombre
al encender las luces.
Has tachado de golpe
todos los días del calendario,
has bebido del agua que
se bebe cuando no tenemos sed.
Las luces que más te alumbraban
empezaban a tiritar y no era necesario el fin
que ocupa el último lugar.
Apagaste la luz de la habitación
y dejaste las cosas como estaban,
cerraste la puerta que se
abre solamente una vez.
Crees que la habitación se ha apagado
 pero sólo tú te has quedado a oscuras.
Ya haces falta en tu cuerpo,
ya haces falta que no seas alguien
inventado, ya hace falta
que no te hayas ido sin apagar la luz.

martes, 8 de octubre de 2019

Hay días que la tristeza se parece
a un desierto apagado.
Hay días que las personas echan
más leña al fuego y no es
para calentar sino para quemar.
La tristeza es la única medicina
que cura cuando sale por
los ojos.

Hay días que la soledad se parece
a un campo de batalla
con un único soldado.
Hay días que las personas te dan
por desaparecido sin llegar a buscarte.
La soledad se parece a un papel
en blanco, arrugado y tirado en el suelo.

Hay días que perseguimos los sueños
para volver, no para ir.
Hay días que las personas  necesitan
soñar con la luz en los ojos.
Los sueños son deseos que lloramos
y creemos que algún día los atrapamos.

Hay días que ser único se parece a poner
el brillo en llamas.
Hay días que las personas piensan
que ser único es ser mejor de lo que uno es.
Pero ser único siempre
es cambiar algo de ti con los demás.




Yo no sé mentir, la única 
forma de decir la verdad
es aquella que se dice
con los ojos enfrente 
de otros ojos, sin pestañear,
aquella que se dice,
cuando tiemblan
las palabras y
sobra la voz.
La verdad sabe que
tiene un único 
viaje, que cuándo
 llega al corazón
siempre se queda
a vivir, se instala junto a las
cosas no dichas y se
siente sola.
Yo siento que la verdad
es una especie de dulzura,
distraída por los embusteros,
y creemos que la única
verdad es la que hiela la vida:
La verdad de la muerte
sólo se pueda salvar
mintiendo a la muerte y 
 no olvidar en la memoria.
La verdad del amor
sólo la puede salvar
poner la mano en fuego
sabiendo que siempre arde,
quién está dispuesto a ser ceniza 
antes que llama.
La verdad de una pena
es apagar la luz,
conocer que la tristeza
es perder las ganas de vivir
sin perder la vida,
es difícil no guardar el dolor
de alguien que lloro por ti,
de alguien que volvió
a los sitios que tu estabas
para recoger tus pies.








Las hojas de un libro.

Cuando se pasan las hojas de un libro hacemos viento escrito, vuelan palabras desordenadas. Cuando se tocan las hojas de un libro en esencia...