Este poema habla
de lo que no se puede separar,
de tus noches que cuidaban de mi,
cuándo elegías las promesas para ser feliz,
recuerdo que cuando llorabas
me hacías entender, que tener
miedo también es tener valor.
Este poema habla
de las cosas que nos hace vivir,
tú inventabas el tiempo que yo necesitaba,
elegías mis sueños para poder dormir,
yo dormía para poder crecer,
ahora entiendo, que rendirse
por una persona no supone
siempre perder la vida propia.
Este poema habla
de lo que no se puede olvidar,
recuerda que en las verdades está lo frágil,
que en el dolor también podías tener un eco,
que podías beber en mi veneno, para morir por mi,
que quién que comparte su vida, para otro,
oculta en lo invisible lo que necesita.
Este poema habla
también cuando ya no estés aquí.
jueves, 12 de diciembre de 2019
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